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©Pablo Felipe Pérez Goyry

14 de marzo de 2000

Naciones Unidas: Millones de personas no tienen acceso al agua...

Por Pablo Felipe Pérez Goyry.
14 de marzo de 2000.

Cada día son más alarmantes las informaciones relacionadas con el medio ambiente y su creciente deterioro. El agua no escapa a esta triste realidad.

Un informe, de la Comisión Mundial sobre el Agua, para el Siglo XXI, nos alerta sobre la realidad de un mundo que agoniza; por la disminución, en nuestro ya maltrecho planeta, – de las disponibilidades - del líquido vital para la existencia.

Esta Comisión - patrocinada por el Banco Mundial y por varios ex jefes de Estado y de gobierno - ha confeccionado un documento dirigido al: "Foro Mundial del Agua, de la Haya"; en el cual se darán cita miles de especialistas y expertos en la materia, desde el viernes 17 de marzo; y seguidamente, un centenar de ministros, los días 21 y 22.

Este informe alude a que más de la mitad de la población mundial sufre las consecuencias de la insuficiente agua, o la que tienen es insalubre. Esta certificación, se suma a la contaminación, la insensata utilización de los recursos hídricos; y el despilfarro de estos. Sin olvidar que más del 20 por ciento, de la fauna y flora de agua dulce, ha desaparecido o se encuentra en peligro de extinción; circunstancias que ya se han registrado en las sendas declaraciones de Dublín, y de Río de Janeiro.

De acuerdo con las cifras, 1.300 millones de personas no tienen acceso al agua potable, mientras que 2.600 millones consumen agua insalubre.

Para tener una idea de la trascendencia del problema, que nos abarrota de pesadumbre, reflexionemos parte de las estadísticas, del Informe de la Comisión Mundial, del Agua(*):

1. - Personas no tiene acceso al Agua Potable: India, 180; África Subsahariana, 290; China, 400; Otros países en desarrollo, 430 millones.

2. – Seres Humanos con acceso a solo Agua Insalubre: China, 930; India, 720; África Subsahariana, 330; Otros países en desarrollo, 330 millones. Es decir, una de cada cinco personas no tienen acceso a Agua Potable.

A lo anterior hay que añadir las enfermedades de origen hídrico, que causan la muerte a niños, más de 4 millones cada año. Más exacto, muere un niño cada ocho segundos.

Es evidente de que los seres humanos se olvidan de las limitaciones acuíferas en el planeta; si tenemos en cuenta que del agua que existe, más del 97 por ciento es salobre.

El mundo en que vivimos, tendrá un crecimiento demográfico estimado en 8.000 millones, en el 2025; debe llamarnos a una seria reflexión, y toma de consciencia; para trabajar con responsabilidad y colaborar con un enfoque humano, sobre el provecho de administrar coherentemente las reservas de agua.

La Comisión demanda atención, pues, la necesidad de agua para regadío aumentará en un 17 por ciento; para la industria un 20; mientras que la más preocupante, la de consumo humano, se estima en un 70 por ciento.

Solo con un control riguroso se puede evitar él malgasto, la contaminación, la deforestación y la degradación de los suelos; lo que permitirá mitigar las secuelas irremediable actuales y futuras, de los recursos acuíferos.

Vivimos en un mudo "globalizado" y "neoliberal"; estamos conscientes de que la riqueza se acumula en pocas manos, y es indudable que el causante tiene la última palabra; porque... serán los inversores del sector privado y las naciones desarrolladas las que tiene la obligación de ayudar a salvar el planeta. No podemos olvidar que son ellos los que de manera indiscriminada violan y contaminan los recursos acuíferos con sus industrias, vertimientos, etc.; son ellos los que tienen en cuidados intensivos nuestro hogar natural.

Hemos iniciado un nuevo milenio, y en pocos días una nueva celebración internacional por el "Día Mundial del Agua"; a celebrarse el próximo 22 de marzo, cuya consigna será: "Agua para el Siglo XXI". Una ocasión propicia para llevar un mensaje de concienciación - a toda la humanidad - sobre la importancia de resguardar los recursos hídricos; para que nuestro planeta no pierda la virtud de continuar siendo azul.


Creo es una responsabilidad moral que todos debemos asumir, ante las actuales y futuras generaciones. Empero... el reto hay que asumirlo con ética – religiosa, política, económica y social -, valentía, fraternidad y buena voluntad universal. Porque el agua es fuente de vida y bienestar para todo lo creado. (Este documento puede ser reeditado - total o parcial - citando Autor y Fuente).

(*). - Los datos son tomados del: "Informe de la Comisión Mundial Sobre el Agua, para el Siglo XXI".


Pablo Felipe  Pérez Goyry

Freelance: Writer - Journalistic Analyst - Photographer Design Editor - CEO - Chemical Industrial & Analyst

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